Según el Informe anual sobre fraude alimentario 2019 publicado por la Comisión europea, que recoge la actividad de la Red de Fraude Alimentario (FNN) de la UE y el Sistema de Asistencia y Cooperación Administrativa (ACA), en 2019 se constata un aumento en el número de casos comunicados (292) respecto del año 2018 (234 casos), 2017 (178 casos) y 2016 (157 casos).

A lo largo del año 2019, se han intercambiado por el sistema ACA-FF 292 casos, un 86% más que los casos comunicados en el año 2016. Este dato no se debe únicamente a la existencia de más fraude alimentario que hace tres años, sino también al mayor control por parte de la UE sobre todas las situaciones que pueden ser susceptibles de ser consideradas como fraude alimentario.

La lista de casos intercambiados en el sistema no representa la totalidad de los incidentes de fraude alimentario que ocurren en la UE. De hecho, hay una advertencia importante en las estadísticas que se proporcionan, ya que, a diferencia del RASFF, el ACA funciona de forma voluntaria y solo para incumplimientos transfronterizos. Por ejemplo, este informe no incluye las actividades que los Estados miembros llevan a cabo a nivel nacional.

Principales sectores afectados

Los 10 principales sectores afectados son:

  1. Carne y productos cárnicos: 44 casos.
  2. Pescado y productos pesqueros: 42 casos.
  3. Carne y productos cárnicos: 38 casos.
  4. Frutas y vegetales: 28 casos
  5. Productos avícolas: 16 casos
  6. Hierbas y especias: 12 casos.
  7. Otros productos alimenticios/compuestos: 12 casos.
  8. Cereales y productos de panadería: 11casos
  9. Bebidas alcohólicos: 10 casos
  10. Frutos secos y semillas: 10 casos

La categoría de “Aceites y grasas” pasa a ser la más notificada con 44 solicitudes; mientras que el año pasado, sólo sumo 29. El aceite de oliva se convierte en el producto que más notificaciones genera en el sistema.

Con respecto al 2018, las categorías de “Alimentos dietéticos y complementos alimenticios”, “Subproductos animales” y “Miel y jalea real” fueron superados por la “Carne de ave”, “Cereales y productos de panadería” y “Frutos secos y semillas”, situándose entre las 10 principales categorías notificadas.

Tipos de fraudes

Por tipo de fraude alimentario, el 47% de los casos se corresponden a un etiquetado incorrecto; el 20%, a sustitución, dilución, adición o eliminación de ingredientes;  el 16% a tratamientos y/o procesos no autorizados; el 15%, a irregularidades en la documentación (ausencia, falsificación, manipulación); y el 2%, a infracciones de derechos de propiedad intelectual.

Hay que tener en cuenta que cada caso a menudo presenta más de una infracción.

Este informe también muestra varios casos coordinados por la UE en 2018, como:

  • Adulterado de Azafrán: los resultados de las investigaciones realizadas confirmaron que el producto era una mezcla de estigmas de azafrán con otras fibras de estambres, no listadas como producto alimenticio. Se incautó un total de 87 kg de azafrán con un valor estimado de 783.000€
  • Resultados de la Operación  OPSON VIII: en dicha operación se llevaron a cabo tres acciones específicas dirigidas contra el fraude en productos ecológicos, la venta de 2,4-dinitrofenol (DNP) como Complemento Alimentario y la sustitución del café Arábica por la variedad Robusta

Sabías que…

Para considerar que un caso es fraude, es necesario que coincidan los siguientes criterios operativos determinados por la Comisión en la Resolución de 14 de enero de 2014: violación de la legislación de la UE, intencionalidad, ganancia económica y engaño al consumidor. Estos criterios no están codificados en la legislación, pero en general corresponden a las normas actualmente vigentes en los Estados miembros para abordar el fraude alimentario.

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Puedes descargar el informe aquí.